Tenacatita, la historia de una falsificación
Guadalajara • El registro más antiguo sobre la
fracción de El Divisadero de Tenacatita, parte del predio rústico de
Apazulco, es del 5 de diciembre de 1945, cuando sus 50 hectáreas fueron
vendidas por José Uribe de Niz a Rubén Paz Espinoza.
Desde entonces, la forma geométrica de este terreno era rectangular.
Con el tiempo, fue modificada en procesos poco claros que presumen la
tradicional corrupción de notarios y del personal del Registro Público
de la Propiedad. Ahora ostenta una forma irregular conforme se anexó la
Punta Hermanos, en la parte norte de la bahía de Tenacatita, frente al
océano Pacífico, lo que ocurrió hace poco más de 20 años.
Esa anexión aparentemente ilegal es materia de un enconado litigio
entre los actuales detentadores de la propiedad, la inmobiliaria Rodenas
SA, del empresario José María Andrés Villalobos, y diversos compradores
de buena fe del ejido El Rebalse de Apazulco, que fueron violentamente
desalojados de la zona hace poco más de dos años, el 4 de agosto de
2010, con lo cual, se derrumbó su sustento económico...
No hay comentarios.:
Publicar un comentario